Con el paso del tiempo tus joyas, sobre todo aquellas que más utilizas, se van ensuciando y desgastando. Igual de importante que son los consejos para comprar, vender y lucir joyas; creemos que son los consejos para limpiar bien tus joyas.
Hoy vamos a responder a la pregunta: ¿Cómo limpiar un collar de perlas?.
Porque el mantenimiento de tus collares de perlas, junto a tus otras joyas es importante, queremos tratar aquí este tema.
Cómo ya os hemos contado, las perlas son un fenómeno de la naturaleza, el resultado en nácar de una partícula extraña que se introduce en un molusco bivalvo. Es una joya única, dura, blanca, brillante y con reflejos iridiscentes. De hecho, se considera un mineral científicamente. Si quieres leer más sobre la composición de las perlas, puedes hacerlo en nuestra revista también. Si no tienes una buena rutina de limpieza de tus perlas, se pueden deteriorar y perder su brillo natural o se podrían formar fisuras en las capas externas del nácar lo cual provoca que se rompan y se pierdan las capas externas, dejando a la perla con un aspecto terrible, y la consecuente pérdida de valor.
Por todo esto, y porque son una joya de alto valor, debemos cuidarlas. ¿Cuáles son los mejores cuidados que puedes darles a tus perlas?.
¿Cómo limpiar un collar de perlas?. Primero, consérvalas bien.
Es decir, asegúrate que están en el joyero o envase correcto cuando no las luces. A pesar de ser duras y compactas, las perlas son suaves y es fácil rayarlas. Te aconsejamos guardar tu collar de perlas extendido para evitar el roce entre ellas, o con otras joyas de tu joyero, y cubrirlo con un paño suave (seda, satén o terciopelo). Siguiendo con la protección, te aconsejamos proteger tu collar de perlas de golpes, de roces, ralladuras, productos químicos, luz solar o temperaturas extremas.
Uno de los riesgos de las perlas es que se sequen. Las perlas necesitan de hidratación, es importante conservarlas en un lugar no muy seco, no exponerlas a una fuente de calor. El frío, tampoco les gusta. Las perlas necesitan de tomar el aire y que éste sea con cierta humedad.
Los productos de belleza, perfumes, aceites o cremas no son buenos amigos de las perlas. Debes introducir una rutina en la que primero te vistes y aplicas todos estos productos y sólo cuando tus cremas y aceites corporales estén secos, ponte las perlas.
Para limpiar tu collar de perlas, lo mejor es utilizar un paño de tela muy suave, existen paños especiales para joyería. O en todo caso, un paño de algodón será perfecto.
Más consejos útiles para el cuidado de tus perlas.
No utilices productos fuertes ni abrasivos, olvídate de cepillos o esponjas duras en plástico. Utiliza un agua tibia con agua mineral o des-ionizada. En las limpiezas diarias, esto será suficiente, no es necesario utilizar jabones ni otros productos de limpieza ninguno.
Para limpiar tu collar de perlas, sigue leyendo esto. Si el collar acumula mucha grasa o suciedad por su uso frecuente, puedes añadir un poco de jabón neutro, cuidado, realmente muy poco. Puedes limpiar tu collar, perla por perla con un paño húmedo y el jabón. Para luego asegurarte que retiras todos los restos de jabón con un paño humedecido sólo en agua.
¿Cómo limpiar un collar de perlas?. Seguimos informando: atención con el broche de tu collar, éste debe limpiarse de forma diferente a las perlas. Si es de plata puedes utilizar los productos que habitualmente usas, pero nunca para las perlas.
Otro elemento importante de tu collar de perlas son los hilos que engastan las perlas. Normalmente son hilo de seda, y cuanto más uses tu collar, más sufrirá, por lo que es importante revisar el hilo y si está deshecho o descolorido, acudir a tu joyero a sustituirlo. Tienes que saber que estos hilos están anudados y son fundamentales para no perder el collar.
A modo de anécdota, contarte que las perlas son de origen biológico por lo que dicen, tienen una vida limitada. Se habla de alrededor de 200 años, aunque se han encontrado ejemplares de siglos de antigüedad. ¿Qué regalo de la naturaleza verdad?.