Hoy nos ocupan los diamantes éticos. Porque los diamantes sintéticos se fabrican en laboratorios y, honestamente, parece que no son tan diferentes de los naturales.
Además, su coste es mucho menor. ¿Y por qué hablamos hoy de los diamantes éticos?. Porque comienza a ser tendencia en joyería. De hecho, uno de los gigantes de la manufactura del diamante, el famoso De Beers ya anuncia que los va a vender. Y su precio oscilaría en los 800$ el quilate.
¿Qué son los diamantes éticos de laboratorio?
Pues es una producción sintética de la mano del hombre. Se fabrican en laboratorio. Además tienen las mismas propiedades ópticas, físicas y químicas. Los diamantes sintéticos son creados en procesos geológicos. De hecho, son también conocidos como diamantes CVD porque es el nombre del método de producción.
Es decir, visualmente son igualmente bellos que un diamante extraído de una mina natural. Por lo tanto, su popularización puede alterar, y mucho el mercado del diamante. ¿No os parece?.
Se trata de una síntesis de alta presión y temperatura. Porque se elaboran a partir del mineral grafito, al que someten a una gran presión. Al mismo tiempo que se utiliza aceite hidráulico para producir una alta temperatura. Por lo tanto, parte del grafito se disuelve, y otra parte se cristaliza en forma de diamante con un uso perfecto para ser tallado en joyería. Además estos diamantes se pueden producir en varios colores: blanco claro, amarillo, marrón, azul, verde y anaranjado.
Por eso De Beers ha creado su propia empresa de fabricación de diamántes sintéticos, se llama Lightbox.
Sin embargo, que no cunda el pánico porque la producción de diamantes sintéticos o diamantes éticos, como queramos llamarla, existe desde los años 50. Para vuestra información, los primeros cristales sintéticos de diamante de calidad de gema los fabricó la General Electric en 1970. Aunque su uso ha sido principalmente industrial, debido a su dureza.
Por eso tal vez, dicen los expertos ni siquiera se tasan de la misma forma. El precio de los diamantes sintéticos es el mismo por quilate, sin graduar la calidad ni el tamaño de la piedra.
Al mismo tiempo con la introducción del Proceso De Kimberley que fue secundado por 49 países bajo la protección de las Naciones Unidas, las cosas han cambiado. Se controla el origen de las piedras para evitar que detrás haya guerras, niños soldados, mutilaciones, esclavitud y mucho más.