El diamante rosa, es sobre todo, una piedra preciosa fantástica. Algunas celebrities internacionales han aumentado el deseo por estas piedras preciosas que son raras y difíciles de encontrar y por las que hay que pagar un precio muy elevado.
Su color rosa se debe a la presencia en mayor o menor medida de nitrógeno en su estructura durante su formación, éste hace que la piedra se comprima y adquiera este tono rosa tan deseado.
Químicamente el diamante es puro, es decir perfecto y transparente, sin ningún matiz ni color. Pero la realidad es otra, casi ningún diamante natural es absolutamente perfecto. La gran parte de los diamantes transparentes son más baratos si tiene tonos amarillos, mientras que los diamantes rosas o azules son notablemente más caros que los transparentes. Científicamente los diamantes se clasifican en dos tipos principales dependiendo de la naturaleza de sus imprefecciones y de cómo éstas afectan a la absorción de la luz.

Los diamantes de tipo I son aquellos que tienen nitrógeno como impureza principal. Estos adquieren tonos blancos, amarillos y marrones. Alrededor del 98% de la extracción actual de diamantes corresponde a este tipo.

Los diamantes de tipo II contienen pocas o ninguna impureza. Aparecen de color rosa, rojo o marrón, son diamantes raros y suelen tener como origen las minas Australianas. Dentro de este tipo también encontramos los diamantes azul acerado o gris.

Y, de vuelta a nuestro protagonista, el diamante rosa. Lo encontramos en gamas diversas dependiendo de su rareza y presenta tonos rosa, rosa anaranjado o rosa púrpura. Todos ellos procedentes de la mina de Argyle en Australia, el mayor yacimiento de estos diamantes del mundo.

Distinguir el Diamante Rosa del Diamante Blanco

Aunque los tonos parezcan mezclarse, los diamantistas los distinguen perfectamente. De hecho. el rosa se ha convertido en un valor refugio en el mundo del diamante por su rareza y su precio, es el preferido de los coleccionistas y profesionales del sector.
Al contrario que el rosa, el diamante blanco abunda en varios yacimientos internacionales, especialmente en Anvers. Los estudios confirman que de un total de 1.490 diamantes rosas probados, sólo un 7% resultaron ser puros, la mayoría restante fueron catalogados como «fancy vivid»es decir «fantasía viva».
El diamante rosa es caro, para daros una idea, con características similares, el rosa será 10 veces más caro que el diamante blanco.

La delicada elección de un diamante rosa

Estos diamantes pueden sobrepasar el precio de los 100.000 dólares americanos fácilmente. La elección de un diamante rosa está guiada por la personalidad del color y sus declinaciones, dependiendo del grado de saturación adquiere denominaciones diferentes como: fancy light pink, fancy pink, fancy purplish-pink, y fancy vivid pink.

Los diamantes rosas más famosos de la historia.

El Graff Pink, de de 24,78 quilates, es un diamante rosa intenso en talla esmeralda y engastado en una sortija. Este diamante fue comprado por Laurence Graff a un precio de 46 millones de dólares americanos en una subasta en Sotheby`s de Ginebra, el pasado Noviembre de 2010. Esta piedra es del tipo IIa y de una pureza VVS2, es el diamante más caro del mundo.

Otro diamante rosa de 10,99 quilates tallado en esmeralda, fue adjudicado en mayo del 2011 por un precio de 10,8 millones de dólares americanos también en Sotheby`s en Ginebra. Con una pureza VS1 y del tipo IIa, es el tercer diamante rosa más caro de las subastas.

Otro diamante con historia es el Darya-i-Nur, original de la India, de 182 quilates y rosa pálido. Pertenecía a los emperadores mongoles y hoy forma parte de las Joyas del Tesoro de la Corona Iraní.

La Hortensia Rosa-Melocotón, es otra piedra famosa de 21,32 quilates y que adoptó el nombre de Hortensia de Ebauharnais, Reina de Holanda y madre de Napoleón III. El Rey Luis XIV lo lucía en sus atuendos, y hoy está expuesto en el Museo del Louvre de París, en Francia.