La turmalina de Paraiba es un fenómeno del mundo de la joyería y las piedras preciosas. Porque en las últimas décadas su valor se ha incrementado de una forma increíble. Actualmente podemos decir que es una de las gemas más valoradas y apreciadas del mundo.

El precio de la turmalina de Paraiba

Porque el precio de un quilate de turmalina de Paraiba puede alcanzar en el mercado los 800.000€. ¿Increíble verdad?.

Aunque la mayor parte de la gente cree que la piedra preciosa más cara y valiosa es el diamante. Pues bien, se equivocan. Porque hay gemas que superan el precio de los diamantes blancos. Fundamentalmente se debe a que son gemas raras y muy difíciles de obtener y extraer de la madre naturaleza.

Pues bien, este es el caso de la turmalina de Paraiba. Esta turmalina es uno de los descubrimientos más bonitos de la gemología del siglo XX. Además para que podáis entender, de cada 10.000 diamantes que se extraen, se consigue 1 paraiba.

La historia del descubrimiento de la turmalina de Paraiba

También la historia de su descubrimiento es muy curiosa. Fue el geólogo Hector Dimas Barbosa, quién estaba convencido que en las colinas rocosas de Paraiba, en el occidente de Brasil, se escondían gemas desconocidas. Y tenía razón, porque después de una década de búsqueda, en el año 1987 descubrió las maravillosas turmalinas neón brillante.

La gema Paraiba es de la familia de los silicatos. Tiene una dureza de 7 a 7,5 en la escala de Mohs. Y es muy especial porque se trata en muchos colores. Pero es sin duda la variedad Paraiba en este increíble azul turquesa. Esta piedra tiene una propiedad óptica llamada pleocroísmo, es decir se pueden apreciar distintos colores y tonos según la luz que recibe. Además de un brillo neón incandescente que irradia la piedra desde su interior. Incluso cuando hay poca luz. Este color se llama eléctrico o neón. Y está producido por el cobre de su interior. Y la hace en una gema incomparable.

Además, las minas originales de Paraiba están casi agotadas. Lo cual aumentó de forma increíble su valor. Por eso, es imposible ver una piedra de tres quilates y buena calidad. Pero, afortunadamente, y desde el año 2003 se descubrieron yacimientos también en las montañas de Mozambique y Nigeria. Desde luego estas gemas son muy parecidas a la Paraiba. Hasta tal punto que se cuestionan si no deben denominarse igual.

Para concluir toda la historia de la gema Paraiba, añadir que fueron las firmas de alta joyería Dior y Tiffany & Co. Poco después diseñadores de prestigio se hicieron adeptos a esta gema, como Lorraine Schwartz y Martin Katz. Lo cual terminó consolidando esta gema como una de las más preciosas, valoradas y caras del mundo.